Popularmente conocido como Nach, el veterano MC alicantino es considerado unos de lo más grandes del panorama nacional e internacional. Comenzó su andadura alla por 1994 con su primera maqueta titulada "D.E.P" y en 1997 con la segunda, "Trucos".
Ya llovido mucho desde entonces, tanto, que nada más y nada menos que 5 son los álbumes que ha llevado a cabo durante su carrera: "En la brevedad de los días", "Poesía difusa", "Ars Magna-Miradas", "Un día en Suburbia" y "Mejor que el silencio". Como el mismo dice, álbumes cargados de Revolución, Actitud y Poesía, álbumes cargados del mejor rap en estado puro.
Si soy sincero, jamás me sentí atraído por la música rap, hasta que allá por el 2004 desempeñando mi pasión por el baloncesto veía intensamente los playoff de la ACB en mi casa, a los que el mismo les ponía banda sonora con su tema "Juega". Recuerdo muy bien como antes y después los entrenamientos mis amigos y yo escuchábamos esa canción sin parar.
Quedé más que fascinado por aquel flujo de palabras tan impresionante, ¿Cómo un hombre era capaz de realizar tal cosa con esa facilidad? Y eso, que con mis doce años de entonces, aún no había escuchado nada, pero absolutamente nada, comparado con el repertorio tan increíble que tiene en la actualidad.
Poco después le perdí la pista e incluso llegue a pensar que el volvería a ser la voz de la ACB cada temporada. Hasta que prácticamente un año después y con la llegada total de Internet a mi vida mientras navegaba por la red, no recuerdo muy bien como, acabe escuchando "Palabras" , que desde entonces es una de mis favoritas.
A partir de ahí lo inevitable, enganche total, búsqueda de todas sus canciones, espera impaciente de cada nuevo disco...
Es increíble como con solo palabras es capaz de expresar tanto. Una de las cosas que más me ha sorprendido es su capacidad de superación, como cada disco puede ser mejor que el anterior. Indescriptible.
Realmente por mucho que piense, por mucho que escriba, tan solo encuentro algo que decir: Gracias por todo los que nos has dado Nach, por hacer vernos las cosas tan claras, por mostrarnos la vida tal y como es, por enseñarnos a nos rendirnos nunca.
Gracias Nach.
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